En los años veinte el cine se fue convirtiendo en una gran arma para los políticos, pues era un espectáculo de masas que movía a miles de personas. Éste servía a lo principales líderes tanto para ejercer su influencia sobre las personas como para imitar los logros de los títulos más sobresalientes, es decir, lo usaban como propaganda y como entretenimiento. El control que ejercían los dictadores como Hitler o Mussolini sobre la industria del cine tenía como principal objetivo transformar al pueblo en cumplidores de la ley y acérrimos seguidores del régimen.
Mussolini.
El primer contacto que tuvo Mussolini con los medios de comunicación fue su época de director de varios periódicos como Il popolo d´Italia.
En cuanto a su imagen debemos destacar la gran importancia que ésta tuvo en sus apariciones en pantalla ya que siempre exaltaban el trabajo y la cultura física; se retrata recogiendo la cosecha, ayudando a obreros o practicando algún deporte. También son destacables sus famosas poses como las manos sobre las caderas o los labios apretados todo esto unido a la suntuosidad del ambiente (himnos,uniformes...).
Mussolini revisaba personalmente las películas que le llegaban a su residencia privada donde a veces asistían miembros de su familia. Aunque siempre se le consideró un gran aficionado al cine, su hijo Vittorio afirmaba que esto se había exagerado pues muchas veces se dormía durante la proyección de alguna película.
Además de esto Mussolini tenía un gran papel como censor ya todo material controvertido se le hacía llegar para que dictara sentencia. Esto ocurrió con la película Ragazzo, donde se podía llegar a interpretar que los fascistas procedían de los bajos fondos y por ello la prohibió.
Hitler.
La vida de Hitler estuvo marcada por su frustrada carrera como pintor y por su participación en la Primera Guerra Mundial. Aquí es donde llega a la conclusión de que Alemania no fue derrotada por la propia batalla sino por la propaganda. Empieza por tanto a manipular los medios a su antojo para convertirla en su principal arma y llegar al poder.
Asimismo escribe su libro Mein kampf donde se aprecian sus grandes líneas de actuación: la propaganda debe dirigirse a las masas, ésta debe poseer pocos puntos, tienen que emocionar al oyente no hacerles pensar y estos puntos deben repetirse de forma constante recurriendo a todos los medios posibles.
Hitler acostumbraba a ver una película diaria ya fuera en su sala privada como su residencia de Obersalzberg. Aquí elegía entre siete u ocho películas y si le gustaba mucho la guardaba para exhibirla a sus invitados que podían ser desde empresarios o actores. Sus películas preferidas solían ser las históricas donde en muchos casos ilustraban a personajes que eran prototipos suyos como en Bismarck.
El estilo de Hitler era muy diferente al de Mussolini: los discursos los aprendía de memoria utilizando una técnica que aprendió de su profesor de clases de interpretación Fritz Basil denominada en "crecendo" donde comenzaba con una voz monótona y acababa con una gran voz.
Stalin.
Los primeros que utilizaron el cine en un arma de propaganda fueron los soviéticos. Stalin consideraba que el cine era una gran fuerza política con la que podía educar a las gentes para convertirlas en seguidoras del socialismo.
La censura que llevó a cabo Stalin era exacerbada pues en algunas ocasiones ordenaba borrar fotogramas uno a uno de los dirigentes que él consideraba enemigos. Esto se puede observar en el filme oktiabr donde Trostky desaparece de la película.
Tal es la actitud de Stalin que cuando quería ver una película no esperaba a que estuviera acabada sino que mandaba que se la trajeran. Ésto ocurrió en Alexander Nesky y durante toda la carrera del director de esta película (Sergei Eisenstein).
En cuanto a sus proyecciones privadas éstas eran situaciones tensas donde sus invitados tenían que medir todo aquello que decían o hacían. Un claro ejemplo de esto es el ataque al corazón que tuvo un proyeccionista tras una reprimenda.
Cabe destacar que la película Tiempos modernos de Charlie Chaplin era la favorita del dictador pues ridiculiza el sistema capitalista.
Franco.
Antes de que Franco llegara al poder el cine ya había comenzado su andadura por la política de mano de Alfonso XIII quien invierte dinero en varias empresas cinematográficas para lograr un cine nacional.
En cuanto a franco debemos mencionar varias películas de su experiencia en Africa. Ir al cine acompañado de su mujer se convierte en una costumbre incluso participa en la película La malcasada.
Tres fueron las personas responsables de la campaña de propaganda de franco: su amigo Millán Astray, su hermano Nicolás Franco y su cuñado Serrano Suñer.
En ocasiones Franco realiza encuentros con personajes distinguidos del cine para ver sus trabajos aunque esto termina ya que muchos aprovechaban para pedirle favores. Una anécdota de estos encuentros es en la que Franco le pregunta con tono de burla a Fernando Rey por su padre (que en ese momento estaba condenado a muerte) y éste se venga de Franco representando a su padre (quien tenía fama de borracho y mujeriego) en Madregilda:
PADRE DE FRANCO.-¿Quién ha hecho la ley?
FRANCO.-Yo.
P.-¿Y qién eres tú para hacer la ley?
F.-Caudillo.
P.-¿Y dale molinos!¿Qué coño es eso de Caudillo?
F.-Jefe del Estado.
P.-Je, je, je.¿Que te han hecho mandamás?¿Pero qué jodío crío!¿Quién me lo iba a decir?Je, je, je.¿Y lo saben en Ferrol?
F.-¿Vaya si lo saben!
P.-¿Y qué dicen?
F.-Ni mu.
P.-¿Qué truhán eres!
F.-Y estoy en todos los sellos. y en todas las pesetas. y en todos los duros, y en todos los cuadernos escolares.Y si yo digo que le levanten a usted una estatua,pues van y se la levantan.
P.-¿Cómo has llegado a mandar tanto?
F.-Gané una guerra.
P.-¿Qué guerra?
F.-Una, que hice.
Franco poseía una par de cámaras, que le habían regalado unos comerciantes indios, y con las que ejercía como cineasta amateur. Una de las personas que llegó a ver sus películas fue el director americano Orson Welles quien en una entrevist realizó la siguiente confesión:
ORSON.-Realmente nuestros jefes de Estado son locos fans del cine. A izquierda y derecha no conozco excepciones.Incluso sé de un Jefe de Estado qu era cineasta y les desafiaría a adivinar quién era...(Pausa)Franco.
PERIODISTA.-¿Hizo películas?
O.-Sí.Dibujos animados.
P.-¿Los dibujaba?
O.-Sñi.Franco.El Generalísimo...Yo vi una.
P.-¿Era divertida?
O.- No.Pero la hizo
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